domingo, 19 de marzo de 2017

India, el miembro más peludo de mi familia.

Os presento a India, uno de los mayores descubrimientos de mi vida.


Mi hermana y yo siempre habíamos querido tener un perro. De pequeñas encontramos un perrito blanco en unas zarzas y mi padre decidió quedárselo, se llamaba Zar. Al principio era solo un cachorro pero no era muy sociable, mordía, rompía todo lo que a su paso quedaba, toda la finca, a la gente que venía y por mucho que mi padre le llevo a sitios específicos de adiestramientos no consiguió que mejorase, asique finalmente, zar se fue con un pastor de vacas con el que pudo vivir feliz en el campo.

Después de la experiencia con Zar, mi padre nunca nos dejó repetir, permitió gatos, tortugas, peces, gatos, iguanas, tarántulas, conejos, pero ningún perro, ni si quiera bebé, por mucho que lo intentamos.

Tiempo después, mi padre y su mujer se divorciaron, lléndose ella y mi hermana a otro chalet. Ese fue nuestro momento de intentarlo, "el momento de debilidad", pues se acercaba su cumpleaños, navidades... y mi hermana y yo pensamos que sería un regalo genial puesto que a ella también le apetecía. Así empezamos a buscar, gente que regalase perros, protectoras, y así la encontramos.



La encontramos en una protectora de animales en Fuenlabrada, su descripción era algo parecido a una pequeña bolita de algodón de azúcar, negra como el carbón, una pobre cachorrita a la que algún desalmado había dejado junto a la basura para deshacerse de ella y sus cuatro hermanos.

Cuando fuimos a por ella nos dijeron: ´"Es una mezcla de perro de agua, no crecerá mucho, será de tamaño mediano tirando a pequeño y no soltará nada de pelo". Según ellos, india sería algo así:

Resultado de imagen de perro de agua negro
Todo genial, nosotras erámos felices con nuestra perrita, toda una bebé a la que amar, abrazar y hacer trastadas. Una perrita a la que consentir todo, con la que jugar, la cual era para vivir dentro de casa, e incluso, algún dia especial, dormir con nosotras.


India fue creciendo y creciendo.. y nos dimos cuenta de que los veterinarios de aquel refugio no tenían mucha experiencia, pues... el supuesto perro de agua que no crecería y que no soltaría pelo, se ha ido convirtiendo en una mezcla de pastor belga y border collie, con un precioso pelo largo que cae y cae sin parar, convirtiendo nuestra casa en una película, por la que pasan ruedas como las del desierto, pero ahora, de color negro.

Así, India ha ido creciendo a nuestro lado, llenándonos de alegría y amor y haciéndonos entender qué es un perro:
- Un perro es otra raza de persona, una raza más pura pero de distinto aspecto. Más pura porque sus valores son, en muchos casos, mejores que los de algunas personas, porque sus sentidos están infinitamente más desarrollados que los nuestros, su inteligencia puede llegar a niveles increíbles si se trabaja y su amor... ¡Ay su amor! Es algo tan tan tan infinito como su fidelidad.

Por eso yo me pregunto, ¿Cómo puede haber personas en el mundo capaces de hacerles daño por placer? No solo a los perros si no a todos los animales.

A nosotras, India nos ha enseñado hasta donde llega su paciencia

Nos ha enseñado hasta donde es capaz de amarnos, de protegernos, de acompañarnos, de lo que daría por nosotras ante cualquiera, nos ha enseñado lo que es verdaderamente la lealtad, ha estado con nosotras mientras llorábamos, nos ha ladrado cuando hemos discutido entre nosotras, nos ha acompañado incluso a hacer pis, nos ha dado calor cuando hemos estado enfermas, y nos ha colmado de amor en todo momento.

Quizás esta entrada no sea una reflexión increíble, pero no me puedo explicar como hay personas que se divierten haciendo daño a unos animales que darían todo por nosotros, incluso por niños que no conocen, por personas en peligro.

Esta entrada va por ellos, por todo los perros, gatos, caballos y hasta mariposas que han sufrido el desprecio humano, por todos aquellos que aún habiendo sido maltratados han conseguido volver a confiar en las personas, y por todos ellos que por desgracia, no lo pudieron volver a intentar. Gracias, por hacer de este mundo, un mundo mejor.


Sonia Dotor Solera.






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