Sonia Dotor Solera

Me presento, mi nombre es Sonia Dotor Solera, nací en el año 1994, por lo que ahora, en 2017 tengo 23 años.


Mi entorno me define como alegre, soñadora, risueña, transparente, con carácter, y con un don para los niños, no porque sea Mary Poppins pero siempre acaban viniendo a mí.

Desde chiquitita me gustaba mucho cuidar a los niños más pequeños que yo, (siempre que mi mamá no les hiciera más caso que a mi) e incluso jugaba todo el día a mamás y papás con mis bebés. A medida que iba creciendo el interés por los niños fue sirviéndome para estudiar, pues yo era la profesora que le contaba a los niños aquello que a mi me tocaba estudiar ese día y poco a poco fui creciendo y creciendo hasta empezar a divagar.

La adolescencia fue una época turbia y peligrosa, donde descuidé mis estudios, mi integridad total, mi relación con mi familia, los 15 años anteriores que mi madre y mi familia habían luchado por mí yo los estaba tirando por la borda. Gracias a esta situación extrema, mi madre me mandó con mi padre todo el verano, pero no para disfrutar sino para trabajar y yo elegí ir a la escuela infantil de su mujer. Creo que ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida, aquel castigo se convirtió en un regalo que desde entonces, repito año tras años ya que ahí pude encontrar mi verdadera vocación y conseguir la motivación que me faltaba para seguir estudiando.

Así lo hice, con el apoyo incondicional de mi familia pero sobre todo de mi madre que ha luchado siempre por que su hija llegue a donde ella se proponga. Y gracias a eso, aunque poca gente de mi entorno entonces apostaba por mí, he conseguido llegar a la universidad, que no es cualquier meta. Ahora me toca seguir esforzándome porque yo no me conformo solo con esto. Yo quiero ser alguien, yo quiero ser útil, yo quiero ser buena en mi trabajo y para ello me formaré en todo lo que esté en mi mano para hacer.

_____________________________________________________________________________

Hoy, Domingo 21 de Mayo, acabamos una nueva etapa, acabamos la asignatura de educación artística, una asignatura donde nos enseñaron a mirar más allá, a dar mas importancia a los pequeños detalles y a prestar más atención a aquello que parece insignificante. No salimos de esta asignatura siendo pintores impecables, pero salimos habiendo formado un grupo fuerte, consistente, donde hay confianza para bailar o andar sobre una mesa, donde cualquier locura es válida y donde todos estamos juntos, codo a codo, compartiendo ideas, experiencias y momentos inolvidables.

Para finalizar este curso, hemos tenido que hacer un vídeo, un vídeo sobre algo que nos inspirase. A mí me inspira mi familia, porque ellos son los que me han apoyado para cumplir mi sueño y los que lo harán siempre. También me inspiran mis amigas, las de siempre, las de toda la vida, las que no me dejarían sola ni un instante, las que levantarían conmigo el muro más pesado del mundo si a mi se me metiese entre ceja y ceja levantarlo, y también las nuevas, mis compis de la uni, las que han hecho que prefiera venir a clase a dormir la siesta, las que hacen que tantas horas de clase merezcan la pena si después nos vamos de cervezas y las que si hiciese falta, vendrían también a levantar conmigo cualquier muro.

Este vídeo va dedicado a todas esas personas que dudan si deben seguir sus sueños, si deben elegir con la mente o el corazón, si deben arriesgarse o conformarse. Va para mis primas y en especial para mi hermana, para que sepan que lo importante es que yo siempre estaré con ellas y moveré al mundo entero si hace falta para que ellas puedan conseguir también su sueño.

Simplemente, Gracias.

El arte de creer en tí mismo
(pincha para ver el vídeo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario